Conoce qué es la violencia obstétrica, cómo se manifiesta y sus efectos en la salud de las mujeres. Aprende a identificarla y exige que se respeten tus derechos obstétricos.
La violencia contra la mujer no se limita a actos físicos como golpes o abuso sexual. También incluye maltrato psicológico, discriminación, negligencia médica y otras prácticas, como la negligencia obstétrica, que vulneran los derechos durante el embarazo, parto y postparto.
¿Qué es y en qué consiste la violencia obstétrica?
La violencia obstétrica es una forma de abuso de poder que vulnera los derechos reproductivos de las mujeres, manifestándose en prácticas que las juzgan, atemorizan y humillan durante el proceso de gestación, el parto y la lactancia.
¿Qué acciones son consideradas violencia obstétrica?
Estas son algunas de las prácticas que constituyen violencia obstétrica:
- Humillación y descalificación: Abuso verbal, insultos y comentarios denigrantes que atentan contra la dignidad. Si hubo gritos o comentarios humillantes que afectaron emocionalmente a la paciente.
- Violación de la intimidad: Exposición del cuerpo de la mujer, falta de privacidad durante el examen físico y la atención médica.
- Violación del consentimiento informado: Realizar procedimientos médicos como la cesárea sin la autorización expresa y libre de la paciente.
- Restricción de la autonomía: Imponer prácticas que limitan la capacidad para tomar decisiones sobre su cuerpo.
- Negación del derecho a amamantar: Obstaculizar el inicio de la lactancia materna, un derecho fundamental tanto para la madre como para el bebé.
- Negar la atención: Consiste en la omisión de tratamientos médicos necesarios, poniendo en riesgo la salud de la madre y el bebé.
- Negación del derecho a una atención de calidad: No proporcionar una atención médica segura, eficaz y respetuosa, tal como corresponde en función de los derechos humanos.
- Detención arbitraria: Retención de mujeres y recién nacidos en el centro de salud debido a problemas para pagar por los servicios médicos, sin considerar los derechos humanos.
Diferencia entre negligencia médica y negligencia obstétrica
En el contexto de la mala praxis en los servicios de salud, la negligencia obstétrica es una forma de violencia específica que se caracteriza por el daño físico o psicológico ejercido por profesionales de la salud en contra de las mujeres.
Cuando las acciones descritas a continuación provocan daños físicos o psicológicos duraderos en la madre o el recién nacido, estamos ante casos de violencia obstétrica que pueden ser considerados negligencia médica.
¿Cómo saber si ha sido víctima de violencia obstétrica?
Tomando como base los criterios establecidos para identificar violencia obstétrica en la ENDIREH (Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares), estas son algunas de las situaciones en las que se confirma que una mujer ha sido víctima de violencia obstétrica:
- Maltrato verbal: Gritos o insultos por parte del personal médico.
- Desatención a las inquietudes: Si se ignoraron las preguntas y preocupaciones de la paciente sobre su parto y el bienestar del bebé.
- Negación arbitraria de la anestesia: Sí, se negó la administración de anestesia sin justificación clara.
- Retrasos en la atención: Sí se prolongó innecesariamente el tiempo de espera para recibir atención médica.
- Separación forzada madre-hijo: Sí se separó a la madre de su bebé sin una razón médica válida y sin informarle.
- Obtención de consentimiento bajo presión: Sí se obligó a la mujer a firmar documentos sin explicarle su contenido o las consecuencias de dar su autorización.
- Imposición de procedimientos médicos: Esto ocurre cuando se realizan procedimientos quirúrgicos como cesáreas, ligaduras de trompas o colocación de DIU sin el consentimiento informado.
Conoce tus derechos
Tu cuerpo, tu decisión. ¿Sabías que puedes elegir la posición en la que darás a luz y que tienes derecho a estar acompañada en todo momento? El derecho de las mujeres a un parto respetuoso implica garantizar su acceso a información sobre todos los aspectos del proceso y de la atención médica, así como el reconocimiento a la libertad de decisión sobre su cuerpo.
Según la OMS, todas las mujeres tienen derecho a una atención de salud de calidad, que incluye un trato digno durante el embarazo y el parto, libre de violencia y discriminación.
Además, las mujeres embarazadas tienen derecho a recibir atención médica gratuita, información clara sobre los procedimientos médicos y tomar decisiones libres e informadas sobre su cuerpo y salud reproductiva.
Preguntas frecuentes sobre violencia obstétrica
1. ¿Qué compensación se puede obtener por negligencia en el parto?
De conformidad con la Norma Oficial Mexicana NOM-007-SSA2-2016, la indemnización por errores médicos durante el proceso de parto en México se encuentra regulada. Los centros de salud están obligados a proporcionar atención médica oportuna, de calidad y segura a lo largo del embarazo, parto y período posnatal. En caso de que una paciente sufra negligencia médica en un hospital privado, tiene el derecho de exigir una reparación integral por los daños ocasionados.
2. ¿Cuánto tiempo después del parto puedo denunciar violencia obstétrica?
Cabe señalar que el plazo máximo para presentar una reclamación por estos hechos es de un año a partir de su ocurrencia. No obstante, si los daños persisten y afectan su calidad de vida después de este periodo, existe la posibilidad de iniciar un procedimiento legal.
3. ¿Es necesario un abogado para denunciar violencia obstétrica?
Lo ideal es contar con asesoría jurídica. Puedes presentar tu queja ante las siguientes instancias:
Vía interna: Como primera alternativa, puedes acudir a la unidad de contraloría interna del establecimiento de salud donde recibiste la atención médica. Esta instancia se encarga de investigar las irregularidades que ocurren dentro de la institución.
Ante las autoridades de derechos humanos: Si consideras que se han vulnerado tus derechos humanos y está involucrado personal de instituciones públicas de salud, puedes acudir a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos o a las comisiones locales correspondientes.
Ante la instancia especializada: En casos de negligencia médica, tanto en instituciones públicas como privadas, puedes presentar tu queja ante la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (CONAMED), encargada de resolver conflictos entre pacientes y prestadores de servicios de salud.
4. ¿Qué documentación y pruebas se requieren para demostrar negligencia médica en el parto?
- Información de contacto: Proporciona tus datos personales (nombre completo, número de teléfono, dirección y correo electrónico) para recibir notificaciones sobre el avance de tu queja.
- Descripción detallada de los hechos: Narra con claridad y precisión los acontecimientos, incluyendo fechas exactas de tus visitas al hospital o clínica. Cuantos más detalles, proporciones, más fácil será investigar tu caso.
- Evidencia: Adjunta cualquier tipo de prueba que tengas (fotografías, videos, documentos médicos, etc.) que pueda respaldar tu denuncia.
- Comprobante de recepción: Solicita un comprobante por escrito que acredite la recepción de tu queja. Este documento te servirá como constancia y permitirá dar seguimiento a tu caso.
Recomendaciones finales sobre violencia obstétrica
Evitar la normalización de la violencia obstétrica: Es común que las mujeres minimicen o justifiquen experiencias negativas durante el parto, atribuyéndolas a un proceso “natural” y necesario para ser madre. Esta tendencia a ver el parto como una experiencia positiva, incluso cuando no lo fue, se conoce como “fidelidad al parto” y constituye una normalización de la violencia obstétrica. Por ello, nuestra primera recomendación es entender y reconocer este tipo de violencia.
Estar informadas sobre la problemática y definir las acciones a tomar en caso de presentar problemas: El concepto de “indefensión aprendida” explica por qué muchas mujeres no se sienten empoderadas para tomar decisiones sobre su propio cuerpo durante el parto. La sociedad, a través de roles de género y estereotipos, ha enseñado a las mujeres a ser pasivas y dependientes.
Profundizar en el análisis de las situaciones y los argumentos: La presión social y la medicalización del parto han llevado a muchas mujeres a aceptar procedimientos invasivos sin cuestionarlos. Esto ha normalizado prácticas que pueden ser violentas y atentar contra sus derechos.
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